lunes, 2 de junio de 2008

LA ECONOMIA Y EL PESIMISMO

Este fin de semana Rodríguez Zapatero, en una radio amiga, ha afirmado que siendo pesimistas no se crea empleo. En efecto, y en eso estoy de acuerdo con él. Pero me gustaría hacerle una serie de matizaciones:

1º Cuando la economía va mal es normal que la gente empiece a tener serias dudas a la hora de invertir su dinero. También cuando los precios suben, sobre todo los productos derivados del petróleo, es normal que haya más reticencias a la hora de gastar el dinero, afectando al consumo del país de manera negativa y, por ende, disminuyendo los ingresos del Estado a través del IVA.

Así que, si sumamos la disminución del consumo y la pérdida de inversión privada, tenemos que las empresas no pueden seguir creciendo, implicando, por lo tanto, una pérdida de ingresos. Y ¿qué pasa cuando una empresa deja de tener beneficios? Pues que hay reducción de plantilla, y si hay menos personas trabajando, hay menos ingresos en la Seguridad Social y menos retenciones a cuenta, y, al haber más paro, hay más gasto por abonar el desempleo.

2º El jefe de Gobierno no tiene como misión pedir fe ciega a los españoles, sino adoptar medidas para que la desaceleración económica pase lo más desapercibida posible, más allá de aprobar insuficientes Reales Decretos Leyes como el RD-Ley 2/2008, de 21 de abril, de medidas de impulso a la actividad económica. Por cierto, la citada norma demuestra que ha mentido de manera deliberada a los españoles en la campaña electoral, porque los 400 € no se van a recibir este año, como ya había avisado en este blog en el artículo "Los 400 € de Rodríguez", sino que van a computar como deducción para la campaña de la Renta 2008 (en el año 2009), y obviamente no es extensible a todos, sino todo lo contrario, sólo beneficiarán a los contribuyentes cuyas rentas de trabajo o de actividades económicas puedan deducir íntegramente toda la mencionada cantidad. La otra medida a considerar es el cambio de las retenciones a cuentas y pagos fraccionados.

3º Algo tiene que hacer el Gobierno con la escalada de los precios del crudo, porque de lo contrario seremos los españoles los que lo tengamos crudo. La escandalosa subida puede llevar al traste cualquier previsión económica familiar y la de pequeñas y medianas empresas pesqueras y de transportes. Sería bueno, por ejemplo, estudiar la posibilidad de subvencionar el transporte público para que muchos particulares dejen su coche guardado en el garaje; también sería positivo tener en cuenta mayores ayudas a las PYMES para que puedan seguir prosperando en su negocio, impidiendo que todas estas subidas salpiquen a los bienes de consumo diario o impliquen la quiebra de muchas empresas.

Lo que es impepinable e ineludible es que se tienen que adoptar medidas urgentes para paliar las secuelas de la crisis económica, y si se tiene que suprimir Ministerios inútiles, mejor que mejor. De paso, sería bueno que Pepiño Blanco en lugar de meter las narices en los problemas internos de otros partidos, que haga algo productivo en la vida, aunque sólo sea una vez, y que sea un verdadero patriota estrujándose lo que tiene encima de su cuello para buscar verdaderas soluciones al problema gordo que tenemos.

1 comentario:

Miguel A. Pazos Fernández dijo...

ZP es así, sigue en su mundo de las maravillas donde la economía va bien, rendirse ante ETA sirve para debilitarla y los niños se hacen como él gracias a EpC. Uy, esto último sí que va a pasar en España.

Un saludo