jueves, 18 de octubre de 2007

EL GOBIERNO NO APRENDE EN EL ASUNTO DE ETA

El miércoles 17 de octubre, el Ministro Bermejo confesó que el Gobierno volverá a negociar con ETA cuando se den las condiciones necesarias para ello, aunque en su, por llamarlo de alguna manera, rectificación, aprovechó y no perdió ocasión de sacar de nuevo su vertiente "moderada", "imparcial" y "objetiva". Pues esa confesión demuestra, en primer lugar, que alguien miente, o el Presidente del Gobierno o Bermejo; en segundo lugar es demostración clara que lo que está haciendo ahora el Gobierno es el paripé para forzar una vuelta a las negociaciones, y si no consigue volver, da la imagen de firmeza del Ejecutivo en la lucha contra el terrorismo; y, en tercer lugar, en que nos gobiernan unos insensatos que no son capaces de aprender de la Historia.


En el proceso de paz que tuvimos que padecer ( y que se advirtió de que era un error) se pusieron encima de la mesa argumentos demagógicos y manipulaciones de la realidad, como comparar el problema vasco con el problema irlandés; sostener que todos los Gobiernos tienen derecho y la obligación de intentar acabar con ETA dialogando; que con la mano dura no se había conseguido acabar con ella; y que siempre Zapatero fue leal cuando estaba en la oposición. En cuanto a esto último, es bueno que la gente recuerde que la lealtad que exige Rodríguez al PP, esa de acepta lo que propongo y calla la boca, no se ajusta a la realidad y circunstancias de los hechos. Así nos encontramos que Zapatero el 14 de abril de 2002 acusó a Aznar de ser irresponsable y prepotente en la lucha contra el terrorismo o Rubalcaba el 19 de ese mismo mes diciendo que el PP buscaba hacer electoralismo con la política antiterrorista.


Tampoco debían tener la conciencia tranquila cuando su único argumento era que Aznar lo intentó en la tregua de 1998. En el que, por cierto, ese apoyo que tanto reclamaban al PP en el proceso de paz no se tradujo en aquella época en un apoyo incondicional del PSOE, véase, por ejemplo que el 29 de enero de 1999, Felipe González dijo: “ahora resulta que cuando se hace una crítica, porque, en realidad, el PP hace una política de plastilina frente al PNV, y nosotros una política de acero, dicen que es una irresponsabilidad hacer unas críticas razonables porque ponen en peligro la paz” o que que “el escenario de salida de la violencia se está planteando por el peor de los caminos” y afirmó que “no me parece sensato lo que está ocurriendo ni creo que vaya a dar ningún resultado positivo”.

Pero el argumento esgrimido por los socialistas más sorprendente es que se debe intentar, da igual lo que haya ocurrido antes. Si se fracasó, se intenta otra vez, y otra, y otra... Es como si un médico decidiera que un enfermo de cáncer tiene que ser tratado con aspirinas, y si no funciona, intentarlo otra vez, así tantas veces como sea posible, olvidándose de aplicar al paciente la quimio. Tiene que quedar claro que los Presidentes del Gobierno no reciben un sueldo, pagado por nuestros impuestos, para que repita los errores del pasado. Su obligación es, sin ningún lugar a dudas, buscar lo mejor para los ciudadanos por medios eficaces, no con recetas caducas. Aunque alguno, no sé si lo dijo por falta de información, riza el rizo afirmando que el sistema policial y judicial no ha funcionado y por eso se tiene que dialogar. Pues, claro, es normal que se diga eso cuando se omite que los Presidentes democráticos han intentado, en mayor o menor medida, dialogar con los terroristas (alguno incluso intentó acabar con ellos aplicando la Ley del talión) cuando estaban, qué casualidad, en los peores momentos.


Toda esta actitud de nuestro Ejecutivo ha hecho que el final de ETA esté más lejos, porque se ha perdido el trabajo realizado en el marco del Pacto Antiterrorista, han vuelto a las instituciones y se han vuelto, por lo tanto, a financiar con dinero público. Y temo seriamente que, de volver a ganar, Rodríguez vuelva a dialogar con los terroristas. Temor que, hasta que no presente las demandas de ilegalización del PCTV y de ANV, no se me quitará. Y espero que quien gobierne a partir de 2008 no cometa este error.





Hoja del programa electoral del PSOE donde se incluye que,

de gobernar, respetarían el Pacto Antiterrorista.





2 comentarios:

Anónimo dijo...

Cualquier Gobierno si ve la posibilidad y sea de la ideología que sea lo volverá a intentar, porque políticamente en muy tentador un “proceso de paz”, si sale bien encumbra y si sale mal el desgaste es relativo pues los ciudadanos son condescendientes.
El tema del País Vasco es jodido, pensemos que ANV fue la tercera fuerza en concejales en Euskadi y la cuarta en Navarra, con 73.000 votos en el País Vasco mas los de Navarra, y eso sin contar un porcentaje seguramente importante de Votos nulos, y con candidaturas anuladas, y que se hace con esa gente?, cual es la solución?, en el País Vasco las fuerzas constitucionalistas están en MINORÍA, policialmente se pueden evitar atentados, acorralar el movimiento radical, pero permanecerá el problema y el resto de Partidos democráticos PNV, EB, EA, ARALAR (ojo al ascenso de NAFAROA BAI), están entre la autodeterminación y el independentismo.

He dicho.

José Enrique Carrero-Blanco Martínez-Hombre dijo...

Supongo que es tentador, pero un gobernante tiene que hacer lo que tiene que hacer, y no lo que esté tentado hacer.