jueves, 16 de junio de 2011

REFLEXIONES SOBRE LAS VICTORIAS Y LAS DERROTAS ELECTORALES

Habiendo cesado ya como Secretario de Programas de Nuevas Generaciones de Oviedo, al ser aceptada mi dimisión en la última Junta Directiva, me gustaría realizar unas reflexiones en público en relación a una idea bastante extendida que la semana pasada escuché, que no le falta la razón, no porque sea lo que se debe hacer sino porque, por desgracia, es la realidad. Esta idea es que, si en lugar de que el Partido Popular hubiera perdido más de la mitad de los votos y la mitad de su representación parlamentaria hubiesen ganado por mayoría absoluta como ha ocurrido en buena parte del territorio nacional, en lugar de llover críticas, como está ocurriendo ahora, nos encontraríamos con que los apoyos, los aplausos y las celebraciones aún no habrían acabado. Como se suele decir las victorias tienen muchos padrinos y las derrotas son huérfanas. Es cierto. Es la triste realidad y demuestra que no se sabe ganar ni se sabe perder.

Pero esta actitud ventajista es totalmente irresponsable porque ni en la derrota hay que ser injusto criticando todo porque sí, ni tampoco en la victoria hay que pintarlo todo de color de rosa. Estas actitudes extremas son malas muy propias de los desleales y trepas que en la derrota ven la debilidad del derrotado y maquinan para removerle para colocarse él o sacar provecho, y en la victoria lo mismo pretendiendo mediante halagos beneficiarse en lo que pueda. Por eso mismo, la derrota que se han llevado los socialistas en casi toda España en estas autonómicas y municipales es consecuencia de su actitud irresponsable de apoyar interesadamente al que se ha demostrado ser un mal Presidente del Gobierno hasta el último minuto en el que le forzaron a pronunciarse sobre su futuro en su partido. Así que asuman las consecuencias de no haber actuado con lealtad hacia los ciudadanos y hacia su propia partido. Les ha perdido a todos ellos sus intereses personales.

De la misma manera, que mientras los socialistas se están sobreponiendo a sus peores resultados electorales, aunque por desgracia lo están haciendo sin ningún atisbo de verdadera autocrítica ya que han impuesto en las digiprimarias a Rubalcaba, o Alfredo, como quiere que le conozcan los militantes socialistas, o bramando contra IU por facilitar Gobiernos del PP, mis compañeros harían bien en bajarse pronto de las nubes, analizar los motivos de sus aplastantes victorias y actuar en consecuencia. En efecto, si olvidan que han ganado no por méritos propios sino por deméritos del adversario estarán cometiendo un grave error.

En cuanto a los resultados en Asturias, resulta obvio decir que son muy malos y que, por otra parte, cualquier persona que pulsara el sentir ciudadano sabía que la derrota estaba cantada. El problema es que la actual Dirección regional se negó a verlos porque creyó que con las siglas se ganaba y el tiempo demostró que estaban totalmente equivocados. Y la autocrítica ha de partir de un verdadero análisis, porque si nos engañamos y creemos que hemos perdido porque se presentó una escisión estaremos condenados a seguir fracasando. Si los asturianos dieron la espalda al PP fue porque estaban hartos de que estuvieran tan cómodos en la oposición, que no tuvieran ganas de ganar unas elecciones y sacar a Asturias del furgón de cola. Y Cascos supuso la posibilidad real de desbancar a los que estaban en el poder, que eran los socialistas. Lógicamente sin la escisión posiblemente el PP habría ganado las elecciones pero como un mal menor, no porque fuera un premio a su trabajo.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Estamos comprobando diariamente que aparte de los supuestos indignados ya había en España muchos más indignados.
Este grado de indignación se ha comprobado en las urnas que han supuesto una gran abstención.

Uno de los motivo por los que ha ganado el PP en casi toda España es por su gran acierto en las decisiones tomadas. No se ha equivocado en ninguna, así es que el electorado no ha visto nada que reprocharle, ni meteduras de pata en los dirigentes del PP.
Todo ha sido un acierto.

Tío Chinto de Couzadoiro dijo...

Si es verdad que el Partido Popular ganó por errores del adversario, lo es también que en las elecciones generales tendrá que hacerlo por mayoría absoluta, pues, de lo contrario, no le servirá de mucho. Y, ahí sí, será más necesario contar con sus propios aciertos que con los fallos ajenos.

desahogandome dijo...

Y yo me pregunto: ¿por qué no hay más como tú?

... y lo digo desde nuestro distanciamento "ideológico", pero lo digo.

José Enrique Carrero-Blanco Martínez-Hombre dijo...

#anonimo# Tampoco lo considero una gran abstención ya que hubo una participación del 66% en las municipales, un 3% más que en 2007. No obstante, sí hay que mencionar que el voto en blano aumentó .0.60% más, y el voto nulo otro tanto más.

#tio chinto de couzadoiro# Aún así todo parece indicar que va a haber mayoría absoluta.

#desahogandome# Hay más gente como yo, eso seguro pero desde los aparatos suelen laminar cualquier posibilidad de que más gente como yo asomemos la cabeza. Prefieren a los mediocres porque no les hacen sombra.