martes, 25 de junio de 2013

LAS DEFICIENCIAS DEL SISTEMA EDUCATIVO: LA LENGUA

Aprovechando la polémica que ha surgido con la propuesta de José Ignacio Wert, Ministro de Educación, Cultura y Deporte, de conceder beca para acceder a la Universidad a los alumnos que superen el 6,5 de nota media, que además, según El Mundo, acaba de recibir el apoyo de la OCDE, voy a retomar el debate sobre el sistema educativo en España, como así anuncié en la última entrada. Pero me gustaría que, los que quieran dejando sus comentarios, participen en el debate, con el único ánimo de poder proponer una alternativa para mejorar el sistema que tenemos actualmente. Eso sí, sería de agradecer que todos nos despojásemos de prejuicios ideológicos.

Para empezar, es imprescindible analizar los aspectos que están fallando en la actualidad del sistema educativo. Si no analizamos con responsabilidad y objetividad los fallos, cualquier medida que se adopte no sólo fracasará estrepitosamente sino que supondrá una pérdida de tiempo y dinero, por no mencionar que es muy probable que suponga un retroceso a lo avanzado positivamente.

¿Cuál es uno de los grandes fallos del sistema educativo español vigente, para mí el más importante? Una clamorosa y deficiente enseñanza de la lengua castellana (probablemente las lenguas cooficiales tengan el mismo problema), y la gran prueba es que no se sabe leer y escribir correctamente, lo que dificulta, por cierto, la correcta comprensión de cualquier texto que uno se eche (triste es, por cierto, ver cómo se confunde hecho del verbo hacer con echo del verbo echar) encima, lo que desincentiva la lectura. ¿Quién se va a poner a leer libros si no comprende lo que el autor le quiere transmitir? ¿Quién se va a poner a leer un libro si cada dos por tres tiene que buscar en el diccionario para conocer el significado de las palabras que desconoce? Así pues, si uno se quiere entretener, a encender la televisión.

Por otro lado, si ya en 1975, el otrora director de la Real Academia de la Lengua, Lázaro Carreter, fallecido en 2004, ya mostraba su preocupación por el devenir de nuestro idioma, aceptando, por ejemplo, vocablos de origen extranjero, en unos casos, y, en otros, nuevas acepciones, por absoluto desconocimiento. De ahí, a modo de ejemplo, que "enervar" lo consideremos sinónimo de "enfadar", en lugar de "debilitar", acepción correcta; que se desconozca que cuando utilizamos la palabra "hombre" nos estamos refiriendo a la especie no a alguien que pertenezca al género masculino, por eso, usamos con absoluta normalidad, sin cuestionarnos nada las palabras como "humano", "humanidad", "humanitario" (la raíz es "homo", que lo es de "hombre"); y ya que he mencionado la palabra "humanitario", no es la primera vez que escucho en un medio de comunicación la siguiente disparatada expresión: "catástrofe humanitaria", que viene a decir, de manera inconsciente, supongo, que dicha catástrofe es en favor de la humanidad. Y así, suma y sigue.

Muchos de estos disparates tienen origen en una deliberada estrategia de los políticos por crear un lenguaje oscuro, lleno de perífrasis, y aportando al cocido una buena muestra de palabras violadas sin contemplación, como ya denunciara, el académico en su columna titulada "El dardo en la palabra", en 1976, con el indebido uso de la "semántica".

 La pregunta, una vez analizado el problema, es la siguiente: ¿qué hay que hacer para mejorar en este campo? En mi opinión, hay que ser riguroso e inflexible en la enseñanza obligatoria. No se debería permitir a ningún alumno obtener el título académico si no se sabe escribir sin faltas de ortografías y sin saber leer correctamente. Por otra parte, habría que tener unas mínimas nociones de latín, porque ayuda, sin lugar a dudas, a una mejor comprensión de nuestro idioma. En efecto, gran parte de nuestro vocabulario es de origen latino y las conjugaciones de los verbos es prácticamente la misma, y tener unos mínimos conocimientos es, como dije, muy recomendable. Lo que no atisbo a comprender es quién fue el genio que decidió eliminar la asignatura de latín de la enseñanza, porque, en BUP, era obligatoria en el segundo curso. ¿Había algún problema en que los alumnos aprendieran a declinar el ROSA-ROSAE, DOMINUS-DOMINI, TEMPVS-TEMPORA, DOMVS-DOMVS O CORNV-CORNVA, RES-REI, o traducir a Julio César o a Cicerón?

En fin, para no alargarlo más, finalizo esta entrada, esperando que sea de vuestro gusto y que deis vuestra opinión.

Twitter: @josecarrerob

2 comentarios:

Geppetto dijo...

En España falla todo y falla porque la Nación esta en manos de los mediocres de siempre, gente que se sabe lejos de la excelencia, que saben que la gente que les vota son unos tarugos y que suponen con buen criterio que con pan, drogas, circo, borracheras y falta de esfuerzo los tendrán comiendo de la mano.
No hay mas que ver lo que esta sucediendo con lo que pretende hacer Wert para controlar, aunque sea minimamente el que los estudiantes hagan lo que deben hacer, esto es estudiar.
Esto de las becas esta siendo utilizado para seguir manteniendo el bajo nivel entre la clientela de inútiles que terminan una carrera sin saber hacer la O con un canuto, eso si con becas a su "inteligencia y buen hacer".
Debería haber dos tipos de becas, las que se dan a los buenos estudiantes y las que se dan a los estudiantes con ganas y sin recursos.
La beca es un premio extraordinario a una labor continuada de un estudiante.Esa debería ser su función, estimular y premiar el tesón a la hora de aplicarse en los estudios.
Eso de dar becas de "estudios" a cualquier ganapán debe ser abolido, sin esfuerzo y sin resultados no debe haber premio.
De la misma forma que los estudiantes inútiles, que van a la Universidad a enredar y no a estudiar, que se pasan el curso ociosamente jugando al MUS, fumando canutos, cogiéndose insignes "castañas" o haciendo política de tres al cuarto deberían tener un tope y si catean X asignaturas durante varios años deberian ser obligados a cambiar de campus o ser expulsados de la Universidad por inútiles, por mas dinero que tengan.
En cuanto a la Universidad publica, esta deberia contar con los mejores profesores y catedraticos posibles, personas alejadas de partidismos políticos y sectarismos ideológicos que enseñaran sus materias, sus asignaturas con dedicación y sapiencia, nada de catedraticos que no aparecen por el aula y la materia la da un indocto idiota lleno de pelos, piercing y estupidez ideologica, si el catedrático cobra, trabaja y si no...a la calle.
Cada dia veo con mayor preocupacion la falta de intelectuales serios metidos a catedráticos, cada dia veo mas muchachitos llenos de estupidez ideológica, llenos de Marxismo trasnochado dando unas clases que avergonzarían al mayor sectario que yo recuerdo dando clases, Tuñon de Lara.
Menos dinero y mas controlar el nivel de los profesores, catedraticos y adjuntos, muchos de los cuales son una verdadera letrina mental que solo transmiten basura y que destrozan las carreras de muchos buenos estudiantes que al topar con estos especimenes se dan la costalada, ya que al no estar de acuerdo con la ideologia que transmiten son rechazados y perseguidos.
La Universidad publica debe ser la universidad de la excelencia, de los conocimientos, del humanismo, de la ciencia , de la discusión inteligente que aporte ideas, no la correa de trasmisión de ideologías obsoletas y criminales que solo aportan todo lo malo que puede llegar a tener el ser humano
Ya esta bien de que la Universidad sea el sitio en el que se hacen personas del montón, socialistas de aluvión que solo sirven para perpetuar la mugre ideológica del Pablo Iglesias y Carlos Marx , Lenin y demas tropa.

Anónimo dijo...

Bueno, tema delicado el de la enseñanza, lo del 6,5 para dar beca, sin comentarios, un periódico saco que Aznar accedió con un 6,4 a Derecho, no pasa nada aplicando la Doctrina Wert no sería apto para la Universidad, lo de ser inspector de Hacienda y constituyo una anomalía que no debió permitirse, anomalía que surgió porque su familia tenía posibles.

Yo comprendo que si una persona suspende no se le dé la Beca, pero situarla en el 6,5 es de un imbecilidad propia de los ignorantes que ocupan el congreso, quizás en un sistema educativo “ideal” donde los profesores universitarios no estuviera ocupando plaza por ser primos, hermanos, hijos, colegas o afines, podría aspirarse a un sistema evaluativo razonablemente objetivo.

Pero cuando nuestras universidades están plagadas de especímenes enchufados, muchos de los cuales no saben hacer la o con un canuto, otros adolecen de problemas psiquiátricos, y otros copian los trabajos de sus becarios, dejar en sus manos la posibilidad de que una persona pueda estudiar es temerario.

La LOGSE acabo con la educación, desde entonces ocurrencias del cáncer de políticos que nos toca, la Ley Wert durara lo que dura la alternancia en el Gobierno PP-PSOE.
Con la educación pasa lo mismo que como otros asuntos básicos del estado, el sistema EGB-BUP-COU, era a mi juicio razonable.

Lo mismo pasa con el aborto había un “status quo” con la despenalización de 1985, pero claro los políticos especialistas en crear problemas donde no los hay: llega el PSOE: barra libre, venga que las menores que no pueden votar ni beber alcohol aborten sin que lo sepan sus padres, llega el PP: nosotros somos del Opus, así que la que quiera abortar que coja un avión para Londres, en el 2016 o 2020 cuando retorne el PSOE ya veremos que se les ocurre, igual desgravaciones fiscales por abortar…

Y así con todos los asuntos de estado.

EL BERTO