DIA 45 DEL DIARIO: 47 DEL CONFINAMIENTO
Con carácter previo, aviso que no me hago responsable de las consecuencias de leer este diario. Si hay alguno se micciona cuando me lee, o se atraganta con comida o está bebiendo algún refrigerio o agua del grifo, le aconsejo que, para evitar molestias futuras, no lo haga. Antes de ponerse a leer, primero vayan al baño hagan sus necesidades, sobre todo vacíen la vejiga debidamente, esto es como hacen los humanos y no como hacen los perros macho; mastiquen lo que tengan en la boca y engúllanlo y traguen el líquido que tengan en el buche. Así nos evitamos problemas. Lo digo esto porque ayer Elena Arrieta (conocida en FB como He Lena) se estaba riendo sola. Desconozco si es porque el confinamiento le ha hecho perder el juicio, y no precisamente porque le hayan notificado ninguna sentencia, o es que se está volviendo demasiado simple y le hace mucha gracia lo que yo escribo. Pero esto no lo digo por He Lena sino por Xandra, Ale Xandra, que ayer casi se me ahoga. Aquí dejo la prueba de lo dicho.
Por eso, y habiéndolo advertido ayer, anuncio que no me hago responsable de cualquier incidente que pudiera suceder al lector, ni tampoco por los daños morales. Las consecuencias las asume el lector bajo su responsabilidad, que además no estamos en EEUU que tiene fama por los pleitos raros que se presentan en los Tribunales.
Hoy, y ya entrando en el último día de mes, me desperté a las 7 de la mañana por el hecho de que empecé a dormir a las 0:00 de la noche del día anterior. Ayer estaba demasiado cansado y mi cuerpo me pedía dormir. Así que planché oreja más pronto de lo habitual. También comentar que hoy he tardado menos de 20 minutos en colocarme las lentillas. A ver si seguimos en esa progresión en lo sucesivo.
La mañana la tuve muy ajetreada ya que tuve que hacer recados para mi madre, además de que hice otro pedido a través de la APP de Alimerka para el próximo martes. Primero fui a Perfumería Diego porque mi madre necesitaba un gorro de baño, en donde también le compré un estropajo de Ajax, que no tiene nada que ver con el equipo de fútbol holandés. Luego fui a la Plaza del Día a comprar sobre todo carne para mi madre, que, por cierto, no había la tapa que me pedía, aunque eso sí le compré el solomillo y la cinta de lomo. Por cierto, el carnicero creo que debió de alucinar cuando en un momento de lapsus mental le pregunto por la "tapa de cerdo". Error que corregí inmediatamente diciendo de ternera. No me preguntéis como salí del paso porque no me acuerdo. Cosas del confinamiento. Y hablando de ternera, hoy Los Caños han empezado con el reparto comida a domicilio, así que me apetecía un buen cachopo de ternera y a las 14:00 vino Javi caminando a llevármelo a casa. He aquí lo que me trajo y que me acabé en una sentada, aunque luego hice la digestión de la boa.
Bien es cierto que en mis tiempos mozos sería capaz de acabarme uno de mayor dimensión como el que comí cuando fui a comer una vez en El Regueral, Lugo de Llanera. Aunque fui con él a ese lugar dos veces, la primera es cuando hice la hombrada de acabármelo uno entero, y la otra, hace 6 años, lo compartí con él. He aquí la demostración del cachopo que sirven en el local llanerense:
Los años pasan y el saque, que nada que ver con el sake, no es el mismo. Pero bueno, siguiendo con mi diario, antes de que Javi me trajera el cachopo, le llevé los recados a mi madre y saqué a Uli a pasear. Y paseando por el Paseo del Sol vi a Laura que estaba sentada en la terraza e hice el gesto de saludar pero estaba hablando por teléfono. Y digo que estaría hablando por teléfono por dos cosas, una por lo que podría ser una alucinación mía como es oír, con un río por medio, su voz, o que alguien tiene un timbre muy similar al suyo. Pero si fue ella, madre mía si que tiene una buena voz. En mi caso, sería completamente impensable. Segundo, cuando pasé por su calle la volví a saludar y si estaba hablando por teléfono. Por supuesto la saludé y ella me devolvió el saludo.
Después de comer entero el cachopo de Los Caños, lo recomiendo a todo el mundo, está buenísimo, -y no lo digo porque Noelia me haya amenazado, lo digo de corazón y de tripa- fui a la cama mientras veía algunos capítulos de The Big Bang Theory, en el que Penny y Leonard vuelven a salir juntos, aunque de manera disimulada. Entre tanto me entró el sueño y dormí una buena siesta. Por cierto, me cago en la banca electrónica y la madre que le parió porque no he podido hacer una transferencia desde la cuenta del Sabadell porque no sé que coj. le pasaba. Supongo que mañana podré hacerlo y si no mato a alguien.
Y, por hoy sigo dejando descansar a los protagonistas del culebrón Sim. Mañana más. Ser buenos.
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